jueves, 11 de agosto de 2011

Todo tiempo pasado fue mejor...



“La mejor selección de futbol fue la del 90 … esos jugadores si se sudaban la camiseta y se jugaba por amor a la patria; ahora solo por dinero”

“Antes era más fácil criar a los hijos porque no había tanta droga ni esos vicios que existen ahora”.

“Era mejor antes, que la vida era más tranquila y uno ni se enteraba de nada… ahora con la televisión e internet se entera uno solo de cosas malas”

“Ahora hay mucha delincuencia por que se han metido extranjeros al país y han traído un montón de costumbres que no son ticas”

“Por quien voto, por Liberación o por Calderón?”


En 5 minutos se me ocurrieron estas frases en relación a la añoranza de un pasado que se protege y se guarda en muchos costarricenses. No es casualidad que el lector se identifique o recuerde alguna vez escuchado estas frases.

Generalmente se hace referencia a estas frases en contextos de derrota o pesar ante situaciones que se enfrentan a diario. Es decir, se utilizan como corolario para regocijarse en el recuerdo de esos “mejores tiempos vividos”.

Cierta frustración aflora en estas personas de no poder resolver sus problemas, o aun peor: aparece un miedo a confrontar esos problemas. Y es justamente ese segundo argumento lo que creo caracteriza hoy en día a muchas personas.

Para mí no tiene sentido preguntarse si todo tiempo pasado fue mejor. No tiene sentido porque regularmente se hace con un fin de autoprotección con el fin de evadir la realidad. Esa evasión de la realidad genera un malestar que hace en muchas ocasiones omitir lo que sucede, optando por la vía más fácil: la ignorancia. Claro, la ignorancia “hasta cuando ya es demasiado tarde”.

Esa necesidad imperiosa de muchas personas a vivir en un status quo donde desean que todo esté exactamente igual todo el tiempo. Ese “vivir tranquilo” que me plantea un dilema mental donde imagino literalmente que las personas desean vivir en una fotografía, donde ni el viento quieren sentir con tal de no alterar ESA realidad… realidad que al fin y al cabo es producto de la colectividad, arreglada con la creatividad individual de cada uno de nosotros.

Esta reflexión la realizo en el marco de los muchos problemas que enfrenta Costa Rica como sociedad. No como nación “vallecentralista”o como sistema político ingobernable como diría cierto tirano de cuyo nombre no quiero olvidarme. Hablo de sociedad con raíces, con instituciones comunes, con pasados comunes y, más importante de todo, con retos comunes. No se puede omitir ni desagregar como se hace ahora la solución de problemas; se deben sentar las responsabilidades, y a la par de eso se debe actuar. Existe mucho inmovilismo de parte de grandes sectores de población a simplemente pasar el tiempo añorando mejores tiempos y pensando que es posible el sueño irrealizable de vivir en una fotografía.

Ese tipo de pensamientos aminoran y restringen la capacidad de acción individual, colectiva, real y urgente en los muchos campos que necesitan indudablemente de acción. ¿Ustedes creen que los estudiantes chilenos están pensando vivir en fotografías, añorando tiempos mejores? ¿O alguno piensa que la revolución de los tulipanes se dio con personas sentadas viendo tele? O será que están esperando a que “alguien” llegue y cambie las cosas mágicamente. ¿Será que algunos piensan que los cinco sentidos existen para no escuchar, no hablar, no actuar, no sentir?

Que no se malinterprete la canción de Facundo Cabral al inicio de esta reflexión; él tiene una historia de vida que simplemente no permitiría siquiera pensar en un "conformismo de vida"; el diría en una de sus mejores canciones:

"yo tengo dos enemigos
pues dos puntas tiene el mal
el hombre que pisa a otro
y el que se deja pisar"

1 comentario:

  1. Iván... gracias por la claridad. Lo disfruté mucho y lo voy a compartir para que muchos/as otros/as ticos/as reflexionen. Excelente la cita de Cabral!

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